sábado, 2 de mayo de 2009

Los Mayos

Los Mayos simplemente o como Festa dos Maios, es una fiesta popular de orígenes ancestrales.
Esta celebración primaveral generalmente se hacía coincidir con el primer domingo de dicho mes y tenía antiguamente connotaciones rituales totémicas a la divinidad primaveral o de los árboles que se han ido perdiendo con el paso de los tiempos.
La celebración de las fiestas mayales es común en muchos países de Europa donde existen variantes similares de la misma festividad.
Los orígenes de esta fiesta se remontan a las antiguas civilizaciones de los fenicios y a los griegos que manifestaban su adoración a sus dioses y lo que estos significaban en fiestas conmemorativas de exaltación de acontecimientos que para aquellos hombres tenían trascendencia, tales como los cambios de estaciones. La fiesta mayumea fenicia exaltaba la primavera. Esas costumbres fueron asimiladas por nuevas civilizaciones prerromanas, como la celta. La festividad celta de Beltane marcaba el comienzo de la temporada de verano pastoral cuando las manadas de ganado se llevaban hacia los pastos de verano y a las tierras de pasto de las montañas. De ahí la adoración de los fenómenos terrenales: tierra, mar y aire. Una de las principales actividades de la festividad consistía en encender hogueras en las montañas y colinas con rituales y significados políticos.[1]
Esta tradición fue asimilada por los romanos en su adoración y culto a multitud de dioses. También asimilaron esta tradición mayumea en honor de la llegada de la primavera y de las primeras flores del año, el día que corresponde con el actual primer día de mayo. Todo poblado romano tenía además de los dioses oficiales los propios autóctonos. En Hispania se adoraba a la diosa Bona Dea también llamada Maya, Maia o Fauna diosa de la fertilidad en la mitología romana con la que se celebraba la llegada de la primavera. Seguramente esta tradición sufrió variaciones con la llegada de la civilización árabe a los campos de Castilla, como la manifestación en cantos o rondas a la persona amada. El Cristianismo ha asimilado multitud de fiestas paganas que se profesaban con anterioridad a su implantación en fiestas religiosas y esta es un claro ejemplo de ello: la mayoría de dichas fiestas paganas pasaron a ser fiestas en honor a la Virgen María.
Así es como la fiesta de la llegada de la primavera y adoración a la Tierra, pasaría a ser una fiesta de adoración a la diosa Maya en tiempo romano y posteriormente fue modificada como variante de exaltación religiosa, con la introducción de la veneración a la Virgen María.[2]
Bandurria con la que se suelen acompañar los rondadores para "Cantar el Mayo".
En la península Ibérica se celebran en casi todas las regiones (tanto de España como de Portugal), siendo el principal hilo conductor el celebrarse a principios del mes de mayo o durante todo él. Generalmente suelen celebrarse la noche del 30 de abril al 1 de mayo en numerosos pueblos de la península Ibérica. La maya o el mayo es un tronco o palo alto (árbol de mayo) que se alza o se alzaba en algunas regiones de Europa, en la plaza o lugar público durante el mes de mayo y donde concurrían los mozos y mozas a divertirse con bailes y festejos. Los jóvenes competían por trepar por el árbol hasta llegar a la parte superior donde debían de coger una bandera, mientras las muchachas les animan desde abajo bailando y cantando en torno al árbol.
Castilla y León
En Castilla y León, los cantos especialmente dedicados a esta celebración, en principio dedicados a la Virgen María, sirvieron luego para rondar a las mozas casaderas, a las autoridades y a los funcionarios recién llegados al lugar. Una orquestilla solía acompañar a estos rondadores. Son habituales las canciones populares, generalmente entonadas en grupo, pudiendo igualmente aprovecharse para rondar a las jóvenes de la localidad. En algunos lugares se acompañan los cantos con bailes tradicionales o letrillas que reflejan la actualidad.
La moza rondada o "maya", quedaba obligada a invitar al mozo a una buena merienda. A los componentes de la orquestilla se les obsequiaba con una garnacha, puesta a refrescar en el aljibe.
También se celebra en algunos lugares de Castilla con cucañas y con cruces adornadas de flores (Cruces de mayo) en muchas poblaciones. También puede ser un palo muy alto, a veces incluso se trasplanta un árbol alto (a veces frente a la iglesia). En el caso de las cucañas solía ser de chopo (ofrece un largo tronco) al que se le quitaba la corteza, se solía colocar en la cima un "trofeo" para que se pudiera lograr gateando a través de él.
La acción de poner el palo o árbol se denomina "colgar los mayos" o "plantar el mayo", incluso "pingar el mayo" (Navares de las Cuevas (Segovia)) y lo suelen realizar los más jóvenes del pueblo.
Pingada del mayo La pingada del mayo se celebra tradicionalmente a mediodía del día primero de mayo, pero puede hacerse por la tarde e incluso por la noche como en las marzas. El ritual y todos los actos que lo rodean, han sufrido muchas variaciones en cuanto a la forma de llevarlo a cabo, debido a diferentes causas. El traslado se realiza con tractor y la fiesta suele trasladarse al fin de semana y en algunos pueblos se hace coincidir la pingada con las fiestas patronales.
De forma tradicional se pinga en Cabezón de la Sierra, La Gallega, Huerta de Arriba, Mamolar, Pinilla de los Barruecos y Rabanera del Pinar.
Castilla-La Mancha
Mayos en Pedro Muñoz.
La tradición de los mayos está muy extendida en Castilla-La Mancha. Se tienen noticias de celebraciones similares en Santa Cruz de la Zarza (Toledo) que tiene lugar en la actualidad la noche del 30 de abril. Las rondallas cantan el primer Mayo a la Virgen del Rosario y después recorren el pueblo cantando y tocando instrumentos de pulso y púa: guitarras, laudes, bandurrias, etc. durante toda la tarde-noche, y todas las chicas reciben su Mayo, dedicado por el novio, amigos, etc. Cada una de estas rondallas porta un farol que es una maqueta que representa a un personaje o figura alegórica de los acontecimientos de la vida social o política del momento. Antiguamente, los mozos salían a rondar por las calles del pueblo acompañados de un farol, debido a la carencia de iluminación y que les ayudaba en la interpretación musical. De ahí el nombre de farol que reciben las maquetas que portan en la actualidad. Algunas de las piezas que se cantan datan del siglo XVII. Esta fiesta está declarada como Fiesta de Interés Turístico Regional.[2] [3] En el pueblo de Totanés, provincia de Toledo, el día 2 de mayo, los mozos del pueblo rondan a las chicas con la tradicional canción de los Mayos.
En el municipio ciudadrealeño de Pedro Muñoz, también cada año el 30 de abril los mozos se reúnen para rondar a las damas y reina de las fiestas y donde se celebra un festival nacional de mayos. En otros lugares (Novés, en Toledo, o Palazuelos, en Guadalajara) los quintos plantan un chopo, que recibe el nombre de mayo.
"El Mayo" de los quintos de Morales del Vino.
Galicia
En Galicia, esta fiesta recibe el nombre de Festa dos Maios y son populares las celebraciones que tiene lugar en Villagarcía de Arosa. Se organiza una competición en la que se premian los mejores maios que son composiciones que se hacen con flores, hierba, helechos, frutas y huevos como materiales más habituales, que se pueden emplear en dos clases de trabajos: los tradicionales, en forma de cono de gran altura recubierto de vegetación, y los artísticos, que constituyen auténticas esculturas vegetales.[4]
Andalucía
En Sabiote (Jaén) se realizan en honor a la patrona, la Virgen de la Estrella. También se celebran en Baena (Córdoba), donde reciben el nombre de cruces. En Castro del Río (Córdoba), muy cerca de Baena, es típico celebrar la fiesta de las cruces de mayo adornando casas, rincones y plazas con cruces hechas de manzanilla.
En unos pocos lugares también se hacen hogueras. Las romerías o procesiones entroncan esta festividad con que mayo es para la iglesia el mes de María.
El mes de mayo es un mes plenamente primaveral y de la celebración de la plena entrada de esta estación vendrían estas fiestas tradicionales.
Extremadura
En Extremadura, como en Andalucía, también predomina la celebración de las Cruces de Mayo sobre otras formas de celebrar dichas fechas (plantar el Mayo o colocación por las calles de muñecos satíricos rellenos de paja y vestidos de ropa vieja, que también se da en algunos pueblos extremeños), a diferencia de en Castilla. La más conocida de las fiestas de la cruz en Extremadura es la de Feria, donde también se representa el auto de la Entrega. En algunos pueblos del norte de Extremadura, especialmente en el Valle del Jerte también se plantan troncos de árboles parecidos a los mayos de otras zonas, pero dicho acto se reserva para el día de San Juan, no para mayo.
Aragón
La tradición de los mayos del sur de Aragón coincide en sus formas con las de Castilla León y Castilla La Mancha. Desde la década de 1980 se recuperó su celebración en Albarracín, y a principios del siglo XXI se continúa su recuperación en muchas poblaciones de la Sierra de Albarracín.
País Vasco
Aunque antiguamente la costumbre estuviera más extendida, el único lugar en el que se conserva actualmente la tradición de plantar El Mayo es San Vicente de Arana, localidad del municipio alavés del Valle de Arana. En esta localidad El Mayo se alza el 3 de mayo en un lugar determinado del pueblo y no se retira hasta el 14 de septiembre.
Los Mayos en el mundo
Un antiguo cuento oriental comienza así:
El Nevrux, esto es, el día primero del año, que es también el primero de la primavera, así llamado por excelencia, es una fiesta tan antigua y solemne en toda la extensión de Persia, desde los primeros tiempos de la idolatría, que la religión de nuestro profeta, tan pura como es en sí, y que tenemos por verdadera, aunque introducida, aún no ha conseguido abolirla pese a estar fundada en el paganismo y a que las creencias que se observan en ella son supersticiosas. Sin citar las grandes ciudades, no hay villa, aldea, arrabal ni cabaña donde no se celebre con extraordinarias funciones.
La celebración de los mayos es propia de pueblos cuyo ciclo de vida se halla fuertemente marcado por el transcurso de las estaciones. Las sociedades se han ido transformando, sustituyendo los modos de vida rurales, basados en la agricultura y ganadería principalmente) por otros de tipo industrial. Debido a ello, esta costumbre de festejar el inicio de la primavera ha ido perdiendo fuerza, hasta haber desaparecido casi por completo.
No ha sido así en todas partes: en los pueblos escandinavos, sus peculiaridades climáticas hacen que la vida se vea fuertemente influenciada por el paso de las estaciones, ya que éste trae consigo desmesuradas diferencias tanto en las temperaturas como en la duración de los días y las noches.[5]
Reino Unido
Danzantes de danza Morris bailando alrededor de un maypole y tocando flautas y tambores.
En Reino Unido la tradición de los Mayos, conocida como May Day, conectada a la festividad de Beltane (significa "el fuego de Bel", el dios sol) se puede rastrear hasta el sur de Lancashire, donde se cantaban los Mayos, en sendas tonadas denominadas la vieja y la nueva Canción de Mayo, la primera de clara evocación celta, la segunda de época posterior. La tradición cuenta cómo se recogían ramas y flores de espino durante la víspera de Cetamain (otro nombre otorgado a la festividad de Beltane)[6] y se llevaban a las casas al amanecer al son de gaitas y tambores para adornar puertas y ventanas. En algunas partes de Inglaterra las muchachas solteras salían en procesión portando ramas floridas antes del alba, momento en el que se iniciaban las danzas de Mayo al son de la gaita, para dirigirse posteriormente, al bosque sagrado donde se rendía culto al Maypole (Vara de Mayo) y a su esposa Lady Flora, asistidos de su corte de hadas, niñas y leprechauds. En esta fiesta, el Maypole es tradicionalmente de arce, de espino o de abedul y se decora con cintas de colores de diferentes longitudes suspendidas de la parte superior, lleno de flores, cubiertos de vegetación y se colorea, para realizar posteriormente un baile festivo-ceremonial entorno suyo, siendo esta vara una representación del roble sagrado y también manifestación del atributo sexual de Bel. Según la tradición anglosajona, de la Vara se prendían cintas a las que se anudaban cada uno de los bailarines para girar en círculo alrededor de la misma.[7]
En el siglo XVI los maypoles eran símbolos comunales, que se erigían en grupo y formaban parte de las actividades de una parroquia (o de varias parroquias si no tenían los medios para hacerlo individualmente). Ellos eran a menudo el foco de rivalidades entre pueblos, que se robaban los postes unos a otros (en Hertfordshire en 1602 y en Warwickshire en 1639 tales robos trajeron episodios de violencia). Los propietarios de bosques (como el Conde de Huntingdon en 1603 enfureció al descubrir que sus posesiones habían sido la fuente de los maypoles usados en Leicester) eran también las víctimas del robo de su madera.[8]
La hostilidad de los protestantes evangélicos hacia los maypoles creció. En primer lugar, se manifiesta significativamente durante la reforma de Eduardo VI, cuando un predicador denunció el maypole de Cornhill como un ídolo, provocando su aserrado y su quema. Bajo los reinados de María I y de Isabel I estos festejos tradicionales carecen de apoyo gubernamental debido a la presión de los protestantes para eliminar los maypoles, pero con la reina Isabel mostrando su simpatía por ellos. Los protestantes sabatarianos,[9] se mostraban insatisfechos con la prohibición de trabajo servil y tampoco consentían otras ocupaciones ordinarias e inocentes en su día de descanso. Por tanto para ellos, los maypoles eran un símbolo de embriaguez y en general de ocupaciones "alegres" prohibidas para celebrarse un domingo.
Entre 1570 y 1630, fueron prohibidos los maypoles de Banbury, Bristol, Canterbury, Coventry, Doncaster, Leicester, Lincoln y Shrewsbury, y no hay evidencia histórica para su uso dentro de los límites de la ciudad de Londres. De las cuatro aldeas de Berkshire cuyos registros siguen existiendo, tres vendieron sus maypoles entre 1588 y 1610. Sin embargo, la tendencia no es uniforme hacia la prohibición de maypoles. Existen muchos registros de su uso continuo en la década de 1630, y Charles James y yo me permitió explícitamente maypole bailar los domingos.[8]
Aquel apoyo real contribuyó a criminalizar las manifestaciones de los maypole durante el Interregnum inglés, según la ordenanza del Parlamento largo de 1644, describiendo a los maypoles como "una vanidad pagana, generalmente de abusos de la superstición y la maldad".[8] La única violación registrada de la prohibición del Parlamento largo registrada es de 1655 en Henley-in-Arden, donde los funcionarios locales pararon la erección de maypoles como juegos tradicionales. Los eruditos sospechan, pero no tienen ningún modo de demostrar, que la carencia de tales registros indica la connivencia oficial en desacatar la prohibición. Sin embargo, ellos están seguros que la prohibición cambió el significado de los maypole hasta convertirlo en un símbolo de resistencia al Parlamento largo y a la República que lo siguió.[8]
Cuando se produjo la Restauración en 1660, en Londres la gente común erigió maypoles "en cada cruce", según Aubrey. El mayor estaba en el Strand, cerca de la actual iglesia de St. Mary le Strand. El maypole erigido allí era el más alto con diferencia de todos y estuvo de pie hasta ser derribado por un viento fuerte en 1672, siendo trasladado posteriormente a Wansted en Essex, sirviendo para el montaje de un telescopio.[10]
En el medio rural, las danzas y los maypoles aparecieron esporádicamente incluso durante el Interregnum, pero la práctica fue revivida sustancialmente y con carácter más alegre después de la Restauración. En el siglo XIX, el maypole se había subsumido en la simbología del Merry Old England.[11] La adición del entrelazamiento de cintas parece haber sido influenciada por una combinación de la moda teatral del siglo XIX y la visión de las personas, como John Ruskin. Parejas de niños y niñas (o de hombres y mujeres) alternativamente de pie alrededor de la base del palo, cogían las cintas por el extremo inferior. Se entrecruzaban unos con otros hasta que las cintas quedaban tejidas alrededor del poste y los danzantes se encontraban en la base.
También hay danzas más complejas que fijan el número de bailarines, los grupos de danzantes de la Reina de mayo, desarrollando un complicado tejido y destejido, pero no son bien conocidos hoy. Sin embargo, tales bailes se realizan cada May Day alrededor del maypole fijo en Offenham, en Worcestershire. los maypoles temporales suelen ser erigidos en los pueblos y los acontecimientos son a menudo bajo la supervisión de los grupos locales de danza Morris.[12]
Una tradición diferente de los maypoles del May Day existe en algunas regiones, que adornaban palos pequeños con aros o intersectando palos, cubierto de flores, vegetación o materiales artificiales tales como papel crepé. Los niños tomarían estos postes hechos a mano a la escuela durante la mañana del 1 de mayo y se concedían premios a las más impresionantes. Esta tradición se conoce como garlanding y fue la característica principal de las celebraciones del May Day en el centro y el sur de Inglaterra hasta mediados del siglo XIX, cuando comenzó a ser substituida por celebraciones formalmente organizadas por la escuela. Esto todavía ocurre de un lado a otro, pero es invariablemente un restablecimiento de una costumbre local que había transcurrido décadas antes.
Francia
Flora y Céfiro, por Bouguereau.
En Francia, la festividad de los Mayos, se vinculó a la Reina de Mayo o Reina Maya, una muchacha virgen, representación de la pureza de la joven Primavera, a la que se agasajaba durante todas la festividad. En Nimes, se aclamaba como tal reina a una doncella a la que se la entronizaba en un baluarte de flores y verde follaje, mientras sus damas de honor pedían a las gentes para su dote. En Grenoble la tradición establecía los casamientos simbólicos entre la reina maya y su pareja, también un joven de la localidad y probadas virtudes. Por otro lado hallamos vinculados al Mayo los denominados Juegos florales, concursos de poesía en el que la espontaneidad de los versos era requisito imprescindible para enmayarse. Estos juegos tienen su origen en las celebraciones romanas en honor a la diosa Flora pero no dejan de ajustarse a las antiguas competiciones celtas desarrolladas entre los bardos de las distintas tribus. Otra forma de celebrar la festividad del Mayo era colgando los campesinos de las puertas de sus amadas un ramo verde entrelazado con hojas de acanto y también era también costumbre plantar un árbol, (también llamado Mayo), enfrente del hogar de aquellos a los que se quiere agasajar. Ejemplo de ello es el árbol de Mayo que plantaba tradicionalmente la curia de París en el patio del Louvre conocido desde entonces como patio de Mayo. El árbol de Mayo en la Borgoña cumplía las mismas funciones que en Inglaterra: servir de poste alrededor del cual se ejecutaban danzas por los mozos y mozas de cada aldea, al tiempo cada uno de los mozalbetes, para probar su destreza había de trepar a lo alto del mástil con mayor rapidez que sus contrincantes. En el norte de Francia, por su parte, se conocía la festividad como la Bendición de los trigos, donde las muchachas, vestidas de blanco inmaculado, salían en procesión junto al resto de aldeanos portando guirnaldas de flores y arrojando al paso del sacerdote flores y hojas de boj. En Nanterre, se conoce esta fiesta como la Fiesta de la Rosa, en la que se elige a la más bella de las muchachas de la localidad y en Niza es conocida como Batalla de las Flores.[7]
Italia
En Italia históricamente se puede destacar como en la Toscana el primero de mayo tenía un papel predominante un mítico personaje denominado Calendimaggio, (personaje que reunía muchos de los atributos del dios Bel, el Apolo romano). Por toda la península italiana es también costumbre la de cantar "Il Maggi" que son coplillas de muy diversa índole, la mayoría de ocasiones amorosas con una importante carga sexual, que los jóvenes cantaban para festejar la llegada de la primavera. En Lucano, los Maggi tienen un carácter auspiciatorio de origen claramente pagano. Finalmente se puede destacar el Albero della cucagna ("Fiesta del Árbol") que se celebra en Siracusa, (Sicilia), durante el mes de Mayo. En dicha fiesta se celebra en conmemoración de la victoria contra los atenienses comandados por Nicias. Sin embargo, Ángelo de Gubernatis en su obra Mitología de las Plantas, cree que sin duda la festividad era anterior a la de dicha victoria.[7
Alemania
Un maibaum, en inglés maypole, (poste de mayo) en Múnich (Alemania).
En Alemania, el escritor Wilhelm Mannhardt cita en su obra Mitos Germánicos, los baños rituales en agua de rocío en el 2 de mayo.[7] Recibe el nombre de Maibaum.
Bélgica En Bélgica, era costumbre entre las muchachas casaderas de Lieja reunirse el primer día de mayo al amanecer, antes de la salida del sol, para buscar tres brotes juntos de caña florida o tres briznas grandes de hierba procediendo a cortarlos a igual altura para proceder a atarlos cada uno con un hilo de seda de un color distinto: negro, (que representa a la soltería); rojo, (que representa al amor apasionado); y verde, (que representa a los deseos más ocultos). Diez días después, las mujeres acudían al lugar donde hubieren atado los brotes para ver cual había despuntado más, siendo éste el pronóstico de sus amores.[7]
Suiza
En la ciudad suiza de Zúrich, incluso en el 1910 se realizaban grandes celebraciones por esta festividad, en la que una procesión de niños que recorrían las calles portando arcos florales precedían al gran pelele blanco, personificación del invierno, que posteriormente era llevado a la plaza del Ayuntamiento para ser entregado a las llamas del fuego purificador de la primavera.[7]
Suecia
En Suecia es conocida la antigua tradición por la que se elige al "Conde de las Flores" en el desarrollo de una multitudinaria verbena celebrada durante la última noche del mes de abril.[7]
República Checa
En la República Checa esta festividad recibe el nombre de májka o máj y es todavía popular en los pueblos del país. Los pueblos compiten para obtener máj más altos que los de sus vecinos y durante la noche los jóvenes del pueblo hacen guardia para mantener el máj a salvo de vándalos de pueblos de vecinos y al mismo tiempo intentar incursiones en los pueblos vecinos para dañar sus máj.
Sri Lanka En el 2005, en la Perahera de Kataragama (procesión de Kataragama) en Sri Lanka, los niños, vestidos con trajes regionales, trenzaban cintas y golpeaban palos bailando una danza en torno a un Árbol de mayo móvil. Luego se invierte la danza y destrenzan las cintas alrededor del Árbol. No está claro si se trata de una tradición adquirida durante el período de colonialismo inglés en la isla (o en general de la influencia europea en Ceilán) o si se trata de una tradición local ancestral.
Estados Unidos
En los Estados Unidos, si bien no se celebró entre el público en general, tuvo lugar un Maypole Dance casi idéntica a la que se celebra en el Reino Unido. Es una parte importante de las danzas de muchos colegios de educación secundaria como parte de las celebraciones del May Day.
La antigua colonia de Merrymount, fundada por Thomas Morton, indignó a sus vecinos puritanos mediante la creación de un maypole.
Comunidades con una gran población sueca suelen hacer celebraciones por la Festividad de San Juan, tales como Chicago, Minneapolis y Lindsborg (Kansas).

12 km en 63 minutos, siguen las molestias en la cadera izquierda , toca ir al Fisio

2 comentarios:

ojordo dijo...

Diosssssss...rolo e ladrillazo, amiguete.....y en mayo no era la epoca de carreras en Vzla??? lo digo por las diarreas y los mangos...Saludos

Cheo Meza Morales dijo...

La verdad es que si mi pana, full largo la vaina. Que bueno lo de los mangos jajajajaja