viernes, 29 de abril de 2011

Correr con Alergia

Se calcula que un 40% de las poblaciones de grandes ciudades las han padecido,las padecen o van a padecerlas. En Estados Unidos, el asma y las alergias se han convertido en la causa más habitual de hospitalización de niños. Estos son los secretos de esta molestia tan común en entrenos primaverales.

Por Hernán Silván

Y mientras tanto no para de aumentar la publicidad farmacéutica de antihistamínicos y otros productos broncodilatadores, a largo plazo, igual de peligrosos que la propia alergia. ¡No parece razonable tratar una intoxicación con más tóxicos! Las reacciones alérgicas aparecen cuando un individuo que ha producido anticuerpos (inmunoglobulinas tipo E, las llamadas IgE) en respuesta a un antígeno, en principio, inocuo (el “alergeno”) vuelve a tener contacto con el mismo alergeno. La palabra “alergia” viene del griego “allos” (otro) y “ergon” (trabajo) y supone una reacción de hipersensibilidad inmediatamente después del segundo contacto del individuo con el antígeno correspondiente. Por tanto, se trata de una respuesta exagerada de nuestras defensas que entienden que ese atacante, en principio banal, puede ser muy peligroso para nosotros y despliegan todo su poder en respuesta a él. Pero lo que realmente se ocasiona es un ataque a nosotros mismos.
Si nuestro organismo reacciona tan violentamente ante factores medioambientales como los gases de combustión de los motores diesel (lo niegan los fabricantes de coches), el dióxido de azufre (lo niegan los dueños de las fábricas), el ozono (los fabricantes de aerosoles y frigoríficos niegan que disminuya la capa polar), la superpoblación (lo niegan los constructores), la excesiva higiene (lo niegan los fabricantes de detergentes y jabones) u otras monedas de cambio que hemos de pagar por nuestro estilo de vida, habrá que hacerle caso. Desde luego nuestro sistema defensivo nos ha servido durante muchos milenios y ahora está empezando a cuestionarse su validez…o es que ya no puede más. A esos alergenos, en principio “amigos”, el polen, los mohos, los árboles, los ácaros o los restos epiteliales muertos de animales (pelos, etc.), se les unen ahora las alergias alimenticias que derivan en un “síndrome irritativo de mucosas” con gran producción de moco y agotamiento final del sistema inmune.
En definitiva, que cuando tratamos un eccema con la típica pomada de cortisona, la inflamación no suele quitarse totalmente, simplemente se desplaza a otro órgano más profundo como los pulmones y reactivar un asma silente. Se conoce muy bien en la práctica médica que cuando coexisten ambos la interrelación es clara. Cuando desaparece uno, aparece el otro. Con los tratamientos supresores de las defensas (cortisona, antihistamínicos) lo que hacemos es cambiar el problema de lugar, pero no lo resolvemos. Es como el niño que se pone las manos en la cara y dice “no estoy”. No queremos ver que el problema no se resuelve “apagando” o “reseteando” nuestro sistema inmune, ese que ha sido nuestro amigo tantos siglos y milenios y ahora se revuelve contra nuestro proceder.
La familia botánica de las Gramíneas es una de las más numerosas, y consta de casi 700 géneros y unas 12.000 especies. Se calcula que las Gramíneas suponen un 20% de la superficie vegetal del mundo. Constituyen la fuente de alimentación animal básica (los pastos son básicamente gramíneas) y humana (el trigo, la cebada, el centeno, el maíz, la avena, el arroz, la caña de azúcar, etc.). El polen de estas Gramíneas suele tener un diámetro de 20-45 μm (lo que le permite una penetración bastante profunda en las vías respiratorias). Tiene forma esférica, de superficie granulada y con un único opérculo. Existe una reactividad cruzada muy alta entre los pólenes de diferentes géneros de Gramíneas, de forma que cuando un paciente se hace alérgico a uno de ellos, será seguramente alérgico también a la mayoría de los otros pólenes de esta familia. Existe una notable relación entre la pluviosidad pre-estacional y la polinización de las Gramíneas. Así, cuando en un período de tiempo que va mas o menos de octubre a marzo (dependiendo de la zona geográfica) llueve mucho, es probable que en primavera la concentración de polen de Gramíneas sea asimismo muy elevada. El pico más importante suele localizarse en los meses de abril-mayo-junio.
Es una familia constituida por 3 géneros y unas 270 especies, de las cuales la más importante es el Plantago (Plantago Lanceolata) Posee una flores muy caracaterísticas, que florecen entre abril y octubre en prados, arcenes de carreteras y baldíos. Su polen es esferoidal, de tamaño pequeño-mediano (19-39 μm de diámetro), con un número variable de poros, y superficie verrugosa. Los pacientes alérgico exclusivamente a polen de Plantago son escasos y, en general, están sensibilizados simultáneamente a Gramíneas.
Mi propuesta como médico no es la que más se ve. Lo siento, en esa solución de los antihistamínicos (¿es verdaderamente una solución u otro problema añadido a nuestro hígado?) no soy creyente. Os propongo recurrir a la Medicina Biológica para moderar o “modular” nuestra respuesta alérgica, para que esta sea mucho menos violenta. No se trata de suprimir “el grito de basta ya” de nuestras defensas. Se trata de matizarlo como buenamente podamos. Las condiciones medioambientales y el estilo de vida no va a cambiar fácilmente, por tanto seamos prácticos.
Si eres de los que a finales de febrero empiezas a sentir picores, lacrimeo o simplemente falta de aire o si eres de los que todos los años en la misma quincena de mayo a junio tienes estos y otros signos y síntomas que pueden catalogarse como “extraños” deberías hacerte pruebas alérgicas para evidenciar que esa situación. Incluso, ahora, con la llegada de los tests de alergia a alimentos y tests de porosidad intestinal se pueden evidenciar aquellos alimentos que “te van peor” y por tanto pueden estar relacionados con estas desaforadas respuestas de tu sistema defensivo.
Hay que empezar por una dieta lo menos ácida posible. Para ello comenzaremos a comer más fruta y verdura de la que habitualmente comemos durante dos semanas y beberemos un poco más de agua de la que habitualmente bebemos. Y para saber si vamos “alcalinizando” nuestro organismos, por tanto eliminando el exceso de ácido, nos observaremos la primera orina del día. Esta no debe ser muy oscura. Si queremos precisar estas observaciones podremos objetivar esta circunstancia con unas tiras de orina que venden en farmacias y que tienen un color amarillento. Al mojarlas con esa primera orina no deben oscurecerse mucho pasado un rato, si viran hacia verde o verde oliva aún estamos ácidos y el terreno ácido es muy buen hábitat para la enfermedad.
Los quince días que siguen podeis tomar un kit detoxicante (laboratorios Heel) que se compone de plantas para limpiar hígado y digestivo (Nux Vomica-homaccord), otras para depurar riñón (Berberis-homaccord) y otras para depurar linfa (Lymphomyosot). Un mes después podemos iniciar el tratamiento “específico” a base de preparados homeopáticos que, ahora sí, serán muy efectivos (gran parte de las críticas que se hacen a la Homeopatía parten de compañeros que nunca han utilizado bien estos fármacos…primer depurar el terreno y luego “sembrar”, es tan poca la cantidad de “semilla” que si no es fácil que se pierda y no rinda lo que esperamos).
El primer preparado aconsejado tras la depuración viene presentado en tubos monodosis y si leéis su composición es una verdadera “vacuna para la alergia”, se llama Pollens (laboratorios Boiron). Su toma puede prolongarse hasta bien entrado el mes de junio y se suelen recomendar dos o tres tomas por semana. Carece de contraindicaciones y no se le conocen efectos adversos.
El segundo preparado aconsejado es Luffa comp.-Heel, bien como spray nasal o en comprimidos, pues contiene interesantes componentes (Luffa, Histaminum, Sulfur) para controlar las rinitis alérgicas, especialmente las estacionales como la llamada “fiebre del heno” donde el lacrimeo y el continuo goteo nasal son la norma. El tercer preparado aconsejado es Euphorbium comp. Gotas nasales S, extraordinario spray biológico para rinitis de cualquier origen (vírica, bacteriana, alérgica) cuando la sequedad es el signo predominante (lo contrario al fármaco que le precede). Para concluir, es difícil el manejo clínico de las alergias pero no por ello debemos renunciar a utilizar, en primer lugar, los tratamientos menos agresivos para con nuestro sistema defensivo. Esto repercutirá también en nuestro mejor rendimiento deportivo.

EL LUNES 18 : 45 MINUTOS EN LA CINTA MAS TRABAJO DE FUERZA EN EL GYM

No hay comentarios: